domingo, 27 de febrero de 2011

Lo que es la humildad (y lo que no es)

    ¿A qué viene este interés por la humildad? ¿Y a qué tanta insistencia? Es decir, ¿qué es la humildad? ¿Para qué en tiempos de orgullo, autonomía del hombre y autosuficiencia del espíritu humano? ¿A qué la humildad cuando todos saben de todo, hablan de todo, no admite nadie consejos de otro, ni que nadie le enseñe? ¿A qué en un mundo -en una Iglesia también, en cualquier comunidad que está formada por hombres- competitiva, donde existen envidias y celotipias?

    La humildad no ha gozado de buena reputación entre los cristianos, ni se la ha tomado en serio, más bien se la ha desfigurado, arrojando en ella cosas que nada tienen que ver con ella, o confundiendo la humildad con otras actitudes del espíritu humano. Desvirtuándola en su ser, presentándola mal y, sobre todo, relegándola como algo a veces infamante y "humillante", la hemos olvidado.

    Digamos primero lo que no es. La humildad no es modestia. Son dos virtudes parecidas, que suelen caminar a la par, pero distintas en sí mismas. La modestia es la virtud de no hablar de sí mismo, de disimular lo que uno es y vale por prevención frente al orgullo y, sobre todo, frente la soberbia espiritual.

    La humildad no es apocamiento. Las personas débiles, con poco espíritu, temerosas, timoratas, que a veces rondan en complejos de inferioridad, no es humildad. Es, simplemente, una autoestima baja o una debilidad del ser humano: "yo no valgo, yo no sirvo", "yo no hablo", "yo no, yo no, soy indigno... no valgo nada".

    La humildad no es enterrar los talentos. Ocultar los dones, virtudes y virtualidades, la potencialidad propia del ser humano, para no querer destacar, para que nadie piense que voy a "lucirme"... Eso es egoísmo, ya que el Señor nos encargó negociar con los talentos y que diesen, al menos, el doble de lo entregado. Y fue castigado no el que negoció más, sino el que lo enterró. Muchos llevan enterrados sus talentos, so capa de humildad. Pero en verdad, todo lo que tenemos, lo hemos recibido del Señor:

"busca qué es lo que el hombre tiene de propio; encontrarás al pecado; busca qué tiene de propio el hombre, hallarás la mentira. Borra el pecado, y todo lo que encuentres en el hombre es don de Dios" (S. Agustín, Serm. 32,10).

    Entremos en el terreno de las definiciones, siempre clarificadoras.

    Humildad viene del latín "humilitas", de la raíz "humus", suelo, de donde viene también "humanitas", humanidad y humano. Es aquello que brota del suelo, de la tierra, que tiene una consistencia efímera y débil porque brota de la tierra. Conecta perfectamente con algunas de las mejores páginas de las Escrituras que nos revelan qué es el hombre -y, por tanto, de donde brota su humildad-:

  • Entonces el Señor Dios modeló al hombre del polvo de la tierra, sopló en su nariz un hálito de vida y el hombre se convirtió en un ser viviente (Gn 2,7: hombre -adam, tierra - adamá)... 
 
  • Con el sudor de tu frente comerás el pan, hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste formado. Ciertamente eres polvo y al polvo volverás (Gn 3,19).

  • Como un padre siente ternura por sus hijos, así siente el Señor ternura por sus fieles; Él sabe de qué estamos hechos, se acuerda de que somos polvo (Sal 102, 13-14).

  • Este tesoro lo llevamos en vasijas de barro, para que todos vean que una fuerza tan extraordinaria procede de Dios y no de nosotros (2Co 4,7).

    La humildad viene definida por Santa Teresa de forma magistral: "La humildad es la Verdad" (5M, 8). Y por San Juan de la Cruz: "humilde es el que sabe de su propia nada y deja hacer a Dios".

    La humildad viene dada por su relación a la verdad, por su relación a Dios, por su relación a nuestro ser personal, el núcleo interior que unifica todas las energías espirituales, referida a nuestra propia alma. Es una virtud espiritual, principio de todas las demás.

19 comentarios:

  1. Muchas gracias por esta maravillosa entrada, solo que me he quedado con más ganas de saber.

    Feliz y santo domingo, D. Javier.

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  2. No se preocupe.
    Esta es la primera catequesis de una serie sobre la humildad, que irá apareciendo a lo largo de varios meses.

    Así provoco las ganas -el deseo- de saber más...

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  3. Me enseñó una persona entregada a Dios, que la verdadera humildad era ser consciente de la propia debilidad y de la inmensa dicha de las Gracias que Dios derrama en cada momento en nuestra alma. Esa alma, será feliz aceptando su propia miseria y sobre todo aceptando la miseria de los demás; no temerá hacer lo que Dios le ponga por delante porque no temerá ni las alabanzas ni las críticas; no esperará nada de los demás porque sabe que nada propio puede dar. La verdadera humildad, al igual que cualquier otra virtud, es un Don de Dios al alma que se deja hacer a través de la oración y los sacramentos. Lo único que podemos hacer de verdad es pedir: "Haz de mí, Señor, un corazón humilde".

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  4. Mi entendimiento de la humildad se acerca a la frase S. Juan de la Cruz que cita el texto:

    "humilde es el que sabe de su propia nada y deja hacer a Dios".

    Aunque la modificaría levemente en su segunda parte:

    "humilde es el que sabe de su propia nada y deja hacer a Dios... a través suya".

    Espero que a San Juan de la Cruz no le importe el parche.

    Feliz y santo domingo :)

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  5. Hermana de Lucena27 febrero, 2011 12:28

    Querido don Javier: me deja usted con la miel en los labios. Nos hace falta mucha más catequesis sobre la humildad. La soberia es uno de los pecados más frecuentes en esta Iglesia nuestra. Espero la próxima sobre este tema con impaciencia. Aquí en Lucena lo seguimos echando mucho de menos, porque antes lo teníamos a mano para hablar de todos estos temas. Bueno, el Señor sabrá... que pase usted un buen día del Señor

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  6. Me ha hecho mucho bien este post y me quedo con ganas de más.
    ¡Buen domingo a todos!
    ;O)

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  7. ¡Bendito sea Dios! algo que necesitaba y de manos de un sacerdote, le doy gracias a Dios. Pues tremenda confusión que hay en mi mente sobre el término HUMILDAD. Creo que muchas veces por querer ser humilde he sido egoísta, y por ser modesta he sido soberbia, ahora lo veo claro.
    Creo que a veces algo me empuja a hablar y hablar de cosas que me han pasado cuando los demás no se atreven, ¡¡¡y soy tímida!!!!, me doy cuenta que debo callar cuando mi esposo disimuladamente me da un codazo. Muchas veces he callado para no pasar por la "sabionda" tal vez me halla escondido con una falsa capa de humildad. Imprimiré esta catequecis para tenerla siempre conmigo.

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  8. Estupenda entrada!!!La humildad, la gran humillada como oí decir un dia.....La humildad es la Verdad y sin ella no se llega a nada, y cuantas cosas la velan......me ha encantado Javier, cada dia tengo que reflexionar un poco en Ella porque he descubierto la soberbia en mi y lo que esta conlleva...envidias, etcetc......pero Gracias a Dios la humildad está cerca de mi y se hace amiga mia , me está gustando tenerla cerca porque me quita muchosomos miedos........Gracias te sigo con interés si sigues hablandonos de ella. La Paz

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  9. ¡Buenas noches nos dé Dios!

    Paso ahora a los comentarios, bastantes sustanciosos.

    El comentario de Nugua da un paso más en la catequesis de hoy sobre la humildad. Aconsejo su relectura varias veces, porque es la síntesis acabada de lo que es la humildad, adónde nos lleva, y la confiada disposición de alma para que Dios obre.

    Miserere, amigo:

    ¡¡No me toque a san Juan de la Cruz, hombre!! ¡Vamos a perder las amistades como lo haga mucho! Entre esto y el "feliz fin de semana", vamos a ver, vamos a ver.... (je,je).

    Además, Miserere, ¿cómo actúa Dios? ¿"A través suya", de la propia alma? Es más amplio como lo deja san Juan de la +: Dios actúa de mil maneras distintas, por mil caminos distintos, circunstancias, cruces, personas para hacer al alma su configuración con Cristo.

    Hermana de Lucena:

    ¡Ay, ya sé quién eres! Discúlpame si te hablo de tú, como siempre.

    Pasas de la humildad personal a la humildad en la Iglesia, en la comunidad cristiana, ante la soberbia que a veces palpamos. Prefiero no abordarlo: tú lo insinúas y es para pensarlo.

    Gracias por escribir. Me debes más de un café.

    Felicitas:

    Me alegro de que se quede con ganas de más. Esa es una virtud del docente: suscitar la inquietud y el deseo antes que extenuar la inteligencia y la voluntad por agotamiento.

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  10. María Auxiliadora:

    "Sí" a lo que dice, a su experiencia. Pero, si me permite, le aconsejo que espere un poco más, a más catequesis, antes de sacar conclusiones definitivas en la vida. Hay que seguir abordando la humildad, considerándola, y con una visión más completa, trabajar y actuar en uno mismo.

    Gosspi:

    ¿Ha descubierto la soberbia en Vd.? ¡Qué gran paso! La inmensa mayoría vivimos con soberbia disfrazada y que no descubrimos en un primer vistazo. Además la soberbia tiene hijas con distintos nombres, y quien no tiene a la madre, la verdad es que se hace cargo de criar a alguna de sus hijas (el orgullo, la presunción, la arrogancia).

    Hay una cosa que me intriga y me desagrada: "Gracias te sigo con interés SI sigues hablandonos de ella". ¿Y si no, abandona Vd. el blog, esta pequeña comunidad???? No lo creo, ¿no?

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  11. Gracias Javier por hablarnos de esta gran desconocida y mal llevada, la humildad, me has despejado dudas, con lo que no es humildad, es tan complicado hablar de ella cuando el Señor no te ha concedido esa gracia, propia de los Santos. Espero nuevas catequesis...
    Paz y bien. Carmen Hernandez.

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  12. "nadie tiene por que ser humilde a costa de la gloria ajena"

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  13. Hola don Javier. Me llevo para meditar "humilde es el que sabe de su propia nada y deja hacer a Dios".También aprendo mucho de las aportaciones y respuestas que da Vd. a los comentarios que compartimos en comunidad.Un abrazo.

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  14. Cristo, a pesar de su condición divina,
    no hizo alarde de su categoría de Dios;
    al contrario, se despojó de su rango
    y tomó la condición de esclavo,
    pasando por uno de tantos.
    Y así, actuando como un hombre cualquiera,
    se rebajó hasta someterse incluso a la muerte,
    y una muerte de cruz.Flp. 2,6-8.
    El cristiano es otro Cristo. Él puede hacernos humildes, lo nuestro es pedirlo. Él se encargará de hacerlo en nosotros, pero, pero: para ir a dónde no sabes, tienes que ir por dónde no sabes. Y esto duele. Aunque la recompensa es con mucho lo mejor: ser morada del Humilde. ¿Qué más se puede pedir?.

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  15. Ah, me encanta la fotografía del Sagrario con el Sagrado Corazón. ¿Podría decirnos de dónde es?
    Un saludo a todos.
    ;O)

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  16. Felicitas:

    Es una foto sacada de Internesss. Desconozco de dónde: simplemente busco "sagrarios", "tabernáculos", para tenerlos archivados y poderlos subir al blog.

    a todos:

    Si pudiérais, no estaría mal que quien quiera y pueda me mande a mi correo fotos de cerca de su Sagrario, o del Sagrario de su parroquia...

    javierpbro@hotmail.com

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  17. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

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  18. No, no pienso abandonar este blog porque me ayuda mucho D Javier....Gracias por contestar nuestros comentarios....

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  19. POR QUE NO EVOLUCIONA LA RAZA HUMANA

    POR TRES PECADOS TERRENALES

    -Una piedra llamada diamante.
    -Un metal llamado oro.
    -Un papel llamado dinero.

    Las palabras Diamante, Oro, y Dinero = Falsedad, Envidia, Codicia, Egoísmo, Fantasía, Hipocresía, Creencias, Poder y Guerras.

    Aquí esta mi conocimiento para vuestra inteligencia

    -Nacemos con el cerebro en blanco
    -Funciona con las primeras sensaciones de la mano

    La inteligencia del ser en su mano está

    Mano= inteligencia divina, automática, autónoma,
    Intuitiva y creativa.

    -Con un cuerpo cuidado a la perfección,
    Automáticamente e intuitivamente, etc.

    -Cada movimiento de mano es pura
    Matemática e inteligencia.

    -Con tu pensamiento puedes coger lo que quieras, cuanto quieras, y el tiempo que quieras, pero acuérdate de cerrarla.
    Eso es inteligencia.

    Cuando no piensas funciona sola.

    -Nacemos con manos inteligentes y un cuerpo perfecto, nosotros lo hacemos deteriorar por falta de conocimientos hacia nosotros mismos.

    -Humanos adora tus manos, son todos tus sentidos, tu pasado, tu presente y tu destino

    Ten presente que:

    El humilde es sabio, y en inteligencia es superior al que no es humilde.
    Crea la dulzura en ti, y alcanzaras maravillas en el universo.

    COMO DESARROLLAR LA MÁXIMA INTELIGENCIA EN EL MÍNIMO TIEMPO

    MOTO SCOOTER CONDUCCION INTELIGENTE

    Necesario:

    -Las tres primeras paradas hacer lo máximo para frenar lo mínimo y suave posible.

    -Ya estas en tu moto, tu eres el profesor y tu eres el alumno.

    -En la sensibilidad de tu mano esta tú inteligencia.

    -Conseguirás tus máximos conocimientos en el mínimo tiempo.

    Hace 40 años la mano del hombre invento el vehiculo de su futuro, la primera scooter.

    Hoy la tenéis en vuestra mano, y lo mejor vuestra inteligencia.

    La Perfección existe, no lo dudéis.

    Que la Paz, el Amor y la Caridad, Reine un vuestro destino.


    ENFERMEDADES MENTALES

    LOS MEDICAMENTOS SUS EFECTOS Y CONSECUENCIAS

    Cada pastilla tomada es una orden al cerebro.

    PENSAMIENTO INCOHERENTE

    Me tomo esta pastilla para no tener mi enfermedad mental.

    Consecuencias:

    Si dejas el medicamento automáticamente te viene tu enfermedad mental.

    Es la orden que tiene tu cerebro.

    PENSAMIENTO INTELIGENTE

    Me tomo esta pastilla porque me ayuda a relajarme y trabaja mejor mi inteligencia.

    Máxima relajación igual a Máxima inteligencia.

    Cuando se le rebaja o elimina el medicamento ese cerebro no vuelve a tener esa. Enfermedad mental.

    El cerebro funciona con las sensaciones de la mano.

    Y la mano con tu pensamiento.

    Atentamente
    Joaquín 53 años

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