jueves, 12 de mayo de 2011

Los contenidos teñidos de ideología (Oración de los fieles - X)

En otros casos (siguiendo lo visto a lo largo de 10 artículos), es el lenguaje el que demuestra la pobreza y la ignorancia al proponer las intenciones de la plegaria universal. Se entremezclan con la oración la ideología al pedir o también pequeños discursos que adoctrinan “para que tomemos conciencia de algo”. Son elementos extraños al lenguaje de la liturgia.
  • “Por la Iglesia y todos los que la formamos, para que con la ayuda del Espíritu, sepa ser una Iglesia viva y atenta a todas las necesidades sociales que nos rodean. Roguemos al Señor”.

¿Esa es la misión de la Iglesia? ¿Estar atenta a las necesidades sociales? ¿Una nueva ONG? 

O un lenguaje que, más o menos sutilmente, critica la realidad de la Iglesia: 

  • “Por la Iglesia; para que incesantemente se reforme en sus instituciones y se renueve en sus miembros” (Libro de la sede, Domingo II Cuaresma). 

¿Constante reforma de las instituciones? ¿Qué se está pidiendo en realidad? Se inculca el pluralismo y la variedad de “opciones”, que responden no a la realidad carismática del Cuerpo eclesial, sino al lenguaje secularista: “Para que la pluralidad de caminos y opciones dentro de la Iglesia no rompa la unidad en la fe y en la caridad” (Libro de la sede, Viernes V Pascua).
  • “Pidamos por toda la Iglesia y por todos los que la formamos, para que sea en el mundo un testimonio vivo del Mensaje de Jesús, trabajando por hacer posible un mundo más justo y solidario, y ayudando especialmente a los pobres y marginados para que puedan salir de las situaciones que les crea la pobreza y marginación. Roguemos al Señor”.

Otro ejemplo más del lenguaje secularizado, otro ejemplo más de la secularización interna de la Iglesia: todo se reduce a vivir un “Mensaje”, como si Cristo y el Evangelio se pudieran reducir a un “Mensaje” o un “Manifiesto”. Y la vida de la Iglesia en clave secularizada, limitada a “hacer posible un mundo más justo y solidario”. Es un discurso secularizado en lugar de una intención litúrgica, cuando aquí no caben ni los discursos ni los conceptos secularizados. Por eso es fácil encontrar expresiones así:

  • “Para que el Espíritu sugiera a la Iglesia recrear nuevas formas de expresión del mensaje cristiano” (Libro de la sede, Sábado VI Pascua); 
 ¿está hablando de publicidad, imagen, marketing? 

  • “Para que la Iglesia sepa presentar el mensaje cristiano atrayente para todos” (Libro de la sede, Dom. XXXII T. Ord., ciclo C): 
 ¿cómo? ¿Rebajándolo, disimulándolo, acomodándolo a lo que el mundo vive? ¿Qué es hacerlo atrayente, dando por hecho, por el tono de la petición, que la Iglesia hoy no sabe presentar ese “mensaje cristiano”? ¿Presentamos un “mensaje atrayente” o llevamos a la Persona de Cristo Salvador?
El lenguaje secularista referido a la Iglesia refleja la ideología de cada momento, de cada época, y se pide a Dios con marcados tintes ideológicos, de donde resultan palabras talismanes, como “solidaridad”, “respeto”, etc.:


  • “Para que la Iglesia, como ciudad puesta en lo alto de un monte, sea para todos ejemplo de convivencia, de respeto, de comunicación, de solidaridad” (Libro de la sede, Dom. V T. Ord.).

  • “Por la Iglesia; para que en su legislación se transparente siempre el mandamiento nuevo de Cristo” (Libro de la sede, Dom. VI T. Ord.).

  • “Por nosotros, aquí reunidos; para que, superando el individualismo, aprendamos a vivir en solidaridad” (Libro de la sede, Dom. XXVIII T. Ord., ciclo C).

  • -“Finalmente, pidamos por todos nosotros, para que tomemos conciencia de que Jesús nos envía al mundo para infundir el Espíritu y seamos testigos de Él allí donde estemos. Roguemos al Señor”.

“Tomar conciencia”: un nuevo lenguaje moralista. Esto más que orar es adoctrinar.

  • “Para que la Eucaristía nos ayude a tomar conciencia de la responsabilidad que tenemos por nuestro pecado y por el pecado del mundo” (Libro de la Sede, Viernes I de Cuaresma).

  • “Por todos nuestros hermanos misioneros, personas que sintiendo una llamada especial del Espíritu, han dejado las comodidades de nuestro mundo para acompañar y ayudar a salir de la pobreza a tantas personas de países pobres y subdesarrollados. Para que el Espíritu siga animándoles cada día en esta importante misión que realizan y para que sigan surgiendo entre nosotros vocaciones misioneras. Roguemos al Señor”.

Otro ejemplo más de un lenguaje que no es cristiano: la misión, las misiones y los misioneros ya no son evangelizadores, sino que, única y exclusivamente van “para acompañar y ayudar a salir de la pobreza”. ¿Esto es un lenguaje para la liturgia? ¿Además no mandó Cristo a evangelizar, “id y proclamad el Evangelio, enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado y bautizad...”?

O este otro formulario:
  • “1. Por toda la Iglesia, para que no se centre tanto en ella misma, sino que se ponga a la escucha del Espíritu. Oremos.

  • 2. Por la humanidad actual, sometida a un sistema cultural y económico que idolatra el tener, el poder y el consumir, y genera deshumanización y pobreza. Oremos”.

Tampoco esto es precisamente proponer una intención para la oración sino un discurso ideologizado: se afirma que la Iglesia se centra en ella misma, con lo cual es una crítica y un juicio; en la segunda petición, se descalifica un sistema económico en lugar de orar “por la humanidad actual”. Por ejemplo: ¿alguien se imagina orando a la primitiva Iglesia “por el despiadado Nerón que se idolatra a sí mismo, para que se convierta”? ¿Con esos adjetivos y esa descripción?

Ante esto, a veces es preferible incluso no orar, no llegar a contestar o cantar "Te rogamos, óyenos". Hay que estar atentos para saber qué nos proponen para nuestra oración y hay que ser delicados y cuidadosos al escribir estas intenciones (¡si es que realmente hay que escribirlas para ser tan originales!)

7 comentarios:

  1. Desde Sevilla12 mayo, 2011 13:34

    Madre querida, ésa es mi oración. Yo pido a Jesús que me atraiga a las llamas de su amor, que me una tan íntimamente a él que sea él quien viva y quien actúe en mí. Siento que cuanto más abrase mi corazón el fuego del amor, con mayor fuerza diré «Atráeme»; y que cuanto más se acerquen las almas a mí (pobre trocito de hierro, si me alejase de la hoguera divina), más ligeras correrán tras los perfumes de su Amado.

    Porque un alma abrasada de amor no puede estarse inactiva. Es cierto que, como santa María Magdalena, permanece a los pies de Jesús, escuchando sus palabras dulces e inflamadas. Parece que no da nada, pero da mucho más que Marta, que anda inquieta y nerviosa con muchas cosas y quisiera que su hermana la imitase.
    Santa Teresa del Niño Jesús. Manuscrito Autobiográfico C, 35 r°

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  2. ! Ay D. Javier ! realmente es preferible no contestar cuando te encuentras con las " palabras talismán " yo cuando oigo lo de tomar conciencia, solidaridad , igualdad etc , pierdo el recogimiento, la paz y el oremus pero si además dicen cosas como esta:
    Por la Iglesia ,por todos y todas los que la formamos....
    O: por nosotros y nosotras aqui renunidos....
    es que me da una alferecía.

    En fin, dediquémonos a leer a Santa Teresita como nos propone desde Sevilla y no pensemos en cosas desagradables

    Buen día a todos

    María M.

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  3. querida María M.

    ¿Pensar cosas desagradables? Mujer de Dios, mire: aquí intento formar y para formar también hay que mostrar los excesos y los defectos, aunque a mí me produzcan náuseas.

    Primero: la oración DE LOS FIELES es la respuesta ORANTE DE LOS FIELES, no la cantidad de chorradas que suben a leer diversas personas. DE LOS FIELES: la respuesta orante. En mi parroquia la cantamos en Cuaresma y Pascua.

    Segundo: ¡Con lo fácil que es pedir! Sólo decir: "Por la Iglesia, por el papa, por los obispos... Por los gobernantes... Por los que sufren, por los enfermos, por los perseguidos...", sin tener que añadir nada más...

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  4. Sin demonizar al cien por cien esas palabras talismán -pues si uno es astuto puede sacar buen partido de ellas-, es cierto que todos los ejemplos traídos por el padre Javier son un claro contraste con otro tipo de oración, de la que hablaba ayer mismo Benedicto XVI en la audiencia general del miércoles (11/05/2011). Dice el Papa: “La oración, antes que una práctica o fórmula, es una postura interior, antes un acto de culto o unas palabras, es un modo de ser ante Dios”.
    El presbítero y profesor Don Felix Arocena, en su libro La celebración de la Palabra – Teología y pastoral, Centre de Pastoral Litúrgica, Barcelona 2005; enseña cómo en otro tiempo los no bautizados, los catecúmenos, debían abandonar el aula eucarística antes de la oración de los fieles: siendo no bautizados no estaban unidos al sacerdocio de Cristo y, por tanto, ni siquiera podían unir su voz a la única voz de la asamblea sacerdotal que es la Iglesia. Esto, de manera breve, demuestra dos cosas: la seriedad de aquellas preces y, curioso, que la clave estaba en la voz unánime de respuesta, y no tanto en el hecho de que la oración que suscitaba tal respuesta tuviera que ser original en el sentido que hoy le damos a este término y que tan bien ha aclarado el padre Javier en su artículo. Hoy en día, desgraciadamente, quizá el contenido de nuestra oración de los fieles sea perfectamente comparable al deseo (recto, espero) de unas esperanzas humanas meramente terrenales, ecológicas, o de acción social sin visos de trascendencia.

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  5. Yo soy "mu" antigua. Me quedo leyendo a Santa Teresita y los místicos.

    Feliz tarde para todos en el Señor y SU Iglesia.

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  6. Comparto la reflexión de Álvaro. La pérdida total de diferenciación entre catecúmenos y fieles bautizados, implica también una perdida del sentido del valor de estar incorporado a la Iglesia totalmente.

    Antes, incluso se restringía el acceso a la Eucaristía a quienes habían pecado de forma grave y pública. Ahora parece que todo da igual y no lo digo con afán inquisitorial.

    Pero tenemos los mimbres que tenemos y es mejor sacar partido de los aspectos positivos que anclarnos a lo mejorable. Ya que todos tenemos acceso a la Eucaristía, la Liturgia debe ser cuidada con más cariño y amor. Gracias D. Javier :)

    Que Dios les bendiga a todos :)

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  7. Gabriel Chacón S.12 mayo, 2011 16:58

    Muy interesante, es cierto que muchas veces respondemos a ¨peticiones¨ que no entendemos, alejándonos de una verdadera oración. Gracias D. Javier por la formación.

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