Un gran silencio envuelve la tierra. El Señor, el Rey, duerme.
¡Despierta, levántate de entre los muertos, y Cristo será tu luz!
No es Sábado de gloria, sino Sábado santo. La Gloria vendrá en la noche de la Pascua.
Hoy es día de meditar y rezar en silencio. No está vacío de contenido ni debemos pasar por el alto el contenido de este día: a ello nos ayudarán los textos de la Liturgia de las Horas.
Silencio.
Y esperanza.
La esperanza sostenida por María y María sosteniendo la esperanza contra toda esperanza.
Silencio.
Y ayuno, el ayuno pascual,
hasta poder romper el ayuno con la comunión eucarística de la Vigilia pascual.
Silencio. Esperanza. Ayuno.
R/ Se alejó nuestro pastor, fuente de agua viva, a cuya muerte el sol se oscureció; ya que fue apresado aquel mismo que retenía cautivo al primer hombre. * Hoy nuestro Salvador destruyó las puertas y las cerraduras del imperio de la muerte.
V/ Destruyó ciertamente la cárcel del abismo y arruinó el poder del enemigo. * Hoy nuestro Salvador...
¡Esperamos y confiamos en que Nuestro amado Jesús resucitará bien pronto!
ResponderEliminarEn cada corazón ha de resucitar y con su ayuda, Don Javier, a eso debemos aspirar.
Esta noche nos llenaremos de Santa Alegría y así la comunicaremos al mundo entero.
Reciba un cordial saludo.
:O)