"Extendí mis manos
y glorifiqué a mi Señor;
porque el extender de mis manos es un signo
y mi dilatación es el madero levantado"
(Oda de Salomón, 27).
"Extendí mis manos y me acerqué a mi Señor;
porque el extender de mis manos es su signo
y mi dilatación es el madero levantado
que fue instalado en el camino del ajusticiado"
(Oda de Salomón, 42).
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N.B. Las imágenes no están elegidas al azar. El orante de la pintura paleocristiana extiende los brazos y las palmas hacia adelante, al frente, al igual que el Señor crucificado. Es la forma de orar cristiana, la forma de orar del sacerdote, "in modum crucis", orando en el Crucificado. La gestualidad de la liturgia es importante, significativa y elocuente.
Repito una palabras leídas en este blog: "Que no temamos a la penitencia". Me las aplico de nuevo en esta Cuaresma,y, aunque no soy sacerdote, extiendo las manos para ofrecerme y para recibir.
ResponderEliminarAl ser Dios grande, aún en las cosas pequeñas, CREO en su Providencia, le confío y agradezco que me mantenga en debilidad... y pecado!
¿Cómo, si no, verme en la necesidad de acudir a El con tanta fuerza y urgencia?
Felix culpa! Sí. CREO.
Y Dios no se deja ganar en generosidad; el ciento por uno, pero hay que extender las manos para recibir, extender las manos para ser ceñidos y llevados -como Pedro- adonde no queramos.
EliminarFeliz culpa que mereció tal Redentor. Adelantamos en Cuaresma por el camino para llegar a la bendita meta de la santa Pascua.
Esta oda cantada es preciosa, don Javier.
ResponderEliminarEn este día penitencial es bueno recordar que en la Cruz de Jesucristo se paran todos los pecados. Pido al Señor que me conceda su Espíritu Santo para cumplir su Voluntad.
«Por el Espíritu Santo se nos concede de nuevo la entrada en el paraíso, la posesión del reino de los cielos, la recuperación de la adopción de hijos: se nos da la confianza de invocar a Dios como Padre, la participación de la gracia de Cristo, el podernos llamar hijos de la luz, el compartir la gloria eterna (San Basilio Magno, Liber de Spiritu Sancto, 15, 36: PG 32, 132.
Gracias. Saludos a todos.
Santa Cruz del Señor, árbol de vida. Nuestros pecados han sido destruidos en él.
EliminarLa petición del Espíritu Santo es muy apropiada en la Cuaresma, y algunas preces (¿de Laudes o era de Vísperas?) traen la invocación, para que sea el Espíritu el que queme nuestros pecados y nos llene del Amor de Dios.
(Disiento de la versión musical: a mí no me gusta nada; lo siento).
Las Odas de Salomón son el descubrimiento más importante sobre los primeros cristianos después de la Didache. Su contenido respira un gran misticismo por lo que algunos creen reconocer en ellas la influencia del Evangelio según san Juan. Los versos que hoy nos ofrece constituyen una descripción poética de la Pasión y Resurrección de Cristo y su victoria. ¡Qué difícil nos resulta ver la victoria de Cristo en la Cruz con nuestras cortas luces!
ResponderEliminar¡Qué Dios les bendiga!
No había investigado mucho sobre las Odas de Salomón, y el agradezco la datación.
EliminarPidamos siempre luz, la del Espíritu, para que nos lleve a la verdad completa sobre la Redención, la Cruz y la Pascua.
Buenas tardes don Javier. Entre el pueblo de Dios hay algunos carismáticos, conversos, 'chalaos', etc. que a la hora del Padre nuestro elevan las manos y las ponen como los egipcios a ver si cae agua, incluso algún pater también, pero todo parece indicar que en todo caso la forma correcta es con las palmas al frente significando al crucificado ¿No?. ¿Esas 'oraciones' litúrgicas palma arriba son paganismos, modas? Un abrazo.
ResponderEliminarNo se me altere NIP, que arrasa vd. con la espada y corta cabezas. Y aunque yo pudiera pensar lo mismo, ya se sabe que una cosa es pensarlo y otra decirlo (jejeje).
EliminarLa forma tradicional, religiosa, es efectivamente extender las manos hacia arriba, como el que mendiga o más exactamente, porque Dios está arriba en los cielos y si mira hacia abajo ve las palmas de las manos extendidas.
Así ora Israel: “Cuando extendéis las manos, cierro los ojos; aunque multipliquéis las plegarias, no os escucharé. Vuestras manos están llenas de sangre” (Is 1,15).
Pero ahora nosotros, no oramos así, porque con las palmas extendidas no horizontalmente sino hacia el frente, recordamos a nuestro Señor crucificado, oramos en Él y Él en nosotros. Por eso es un gesto específicamente cristiano.
Ahora bien, en las celebraciones normales, es lógico que si los fieles quieren extender las manos para orar sean un tanto "discretos" en el gesto, ¿no le parece? Y, por último, que el sacerdote que ora en el altar ofreciendo la Oblación, el sacrificio, sí ore realmente in modum crucis, como el mismo Señor en la cruz.
Una vez que he logrado contener la risa ante su comentario reviviendo con mi hijo Ricardo la celebraciones en la época de catequesis de primera comunión de mis pequeños en un colegio religioso (cogidos de la mano o levantando las manos al rezar la oración del Señor) y, antes de que don Javier intervenga, permítame que, en el espíritu de comunidad que propicia el piloto de este blog, me una a su pregunta. Don Javier, las posturas y gestos en la Santa Misa ¿no están establecidas en las rúbricas litúrgicas? Por lo que yo he leído la uniformidad de las posturas y gestos es signo de la unidad de los miembros de la comunidad cristiana congregados para la Sagrada Liturgia lejos de emotividades subjetivas particulares. Lo que apunta NIP ¿no es producto tanto de un exacerbamiento de la emotividad como de la confusión que a veces existe entre sacerdocio ministerial y sacerdocio común? Si yo me dejara llevar por mi emotividad me arrodillaría en la Bendición a los fieles
ResponderEliminarTuve que hacer un receso en la sesión de comentarios para ir a exponer el Santísimo, rezar, confesar y celebrar la Santa Misa. Se reabre la sesión de comentarios.
EliminarEs verdad que los gestos y posturas están descritos en la Introducción General del Misal romano y en ningún momento aparece que los fieles oren así. En la edición italiana -como cité alguna vez en este blog- sí hay una monición al Padrenuestro donde se les dice a los fieles que pueden extender las manos.
No es una confusión entre sacerdocio ministerial y bautismal o común; la imagen es la de "LA orante", una mujer, porque era la forma común de todos los fieles en la oración privada y en la oración del Pater. Habría confusión -y algunos la han procurado así- si hicieran rezar a los fieles partes que sí son del sacerdote: "Señor Jesucristo, que dijiste a los apóstoles..."
Coincido, por supuesto, en lo ridículo de juntar las manos de todos: puro y duro secularismo, que resalta la horizontalidad.
Preciosas las odas que comparte con nosotros D. Javier. Dignas de ser oradas, cantadas y hasta repetidas durante nuestras actividades diarias.
ResponderEliminarAlzar la manos hacia el Madero... vaya si tiene importancia la Cruz. Un abrazo en el Señor :)
Alzamos las manos hacia el madero, espiritualmente hablando, las extendemos como Quien está en el madero para orar. Esa es la postura, por antonomasia del sacerdote al ofrecer el Sacrificio eucarístico.
EliminarUn fuerte abrazo