miércoles, 20 de junio de 2012

Coloquio interior del sacerdote


Permaneced en mi amor” (Jn 15,9). Esta invitación expresa el ideal de las aspiraciones del Señor con respecto de sus sacerdotes. Esta es la consigna que os entregamos: Cultivad, hijos queridísimos, la intimidad con Cristo por medio de una sincera y profunda vida interior. Es el primero y el más dulce deber de vuestra vida sacerdotal. Es la actitud más característica de quien ha recibido la investidura sacramental de “dispensador de los misterios de Dios” (1Co 4,1). Es la respuesta lógica a quien os ha escogido de antemano, mediante un singular acto de amor, para ser sus amigos (cf. Jn 15,16) y ha pedido vuestras vidas, vuestros talentos, vuestra total disponibilidad, para servirse de vosotros como sus instrumentos vivos, como los canales de su gracia, como los transmisores de sus ejemplos y de sus palabras, como su prolongación en el mundo.

No creáis jamás que el ansia del coloquio íntimo con Cristo detenga o reduzca el dinamismo de vuestro ministerio; es decir, demore el desarrollo de vuestro apostolado exterior, o incluso acaso sirva de pretexto para no comprometerse a fondo en el servicio de los más, y para sustraerse a las propias responsabilidades terrenas. Es verdad, exactamente lo contrario. Lo que se da a Dios no se pierde jamás para el hombre; más bien es estímulo a la acción y fuente fecunda de energías apostólicas".

(PABLO VI, Alocución a un grupo de nuevos sacerdotes salesianos, 4-abril-1971).

9 comentarios:

  1. Santa Faustina Kowalska rezaba: "Señor, danos sacerdotes santos; Tu Mismo consérvalos en la santidad" porque sin un encuentro verdadero con Cristo no es posible la santidad.

    Hoy celebra la Iglesia la vida de los mártires ingleses entre los años 1535 y 1679, hombres y mujeres, sacerdotes, religiosos y seglares condenados a la horca acusados de alta traición por celebrar Misa clandestina y dar cobijo o cualquier clase de ayuda a un sacerdote. Ana Line condenada por albergar a un sacerdote en su casa (“ojala hubiera podido albergar a miles”), Margarita Clitheroe (“Este camino al cielo es tan corto como cualquier otro”)…

    No olvidemos rezar por nuestros sacerdotes, vivos y difuntos ¡Nos va en ello la vida!

    ¡Qué Dios les bendiga!

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    1. " Sin mi no podeis hacer nada "... Sin la unión constante y profunda con Cristo se ahoga cualquier apostolado .
      Julia Mª , no olvidemos rezar por ellos , también por los difuntos ( eso se me suele olvidar )
      D. Javier me encanta cuando nos trae textos de Pablo VI

      Un abrazo

      María M.

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    2. Sí, por favor, rezad por los sacerdotes, por todos.

      Y también, en línea con el texto de hoy, pedid que los sacerdotes no olviden de vivir intensamente el coloquio interior con Cristo, que sean profundamente orantes: no arrinconen el rezo del Oficio divino y tengan su mejor amigo en el Sagrario.

      María M.:

      A mí Pablo VI me gusta muchísimo y procuro que aquí lo conozcamos, aunque en general no esté de moda. Como a san Agustín, yo le debo mucho y creo que es un maestro.

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  2. ¡Qué alegría ser sacerdote y poder dar la vida por Cristo en exclusividad! Es lo máximo. También, en el cielo, hay un lugar reservado para ellos.
    Cada día, en la Santa Misa, rezo, especialmente, por el Santo Padre, por todo el clero, por todos los sacerdotes que conozco, por mi director espiritual, por mi sobrino, por toda la Iglesia y para que haya vocaciones nuevas y santas.

    D. Javier, precioso el texto que nos trae hoy.

    Muy feliz y santo día para todos. QDLB.

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    1. Gracias por su oración cotidiana por los sacerdotes. Seguro que llega hasta el altar del cielo y sirve allí donde ni imaginamos.

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  3. ... como su prolongación en el mundo.
    Totalmente de acuerdo con esas palabras.

    Y con estas otras que nos sirven a todos:
    Lo que se da a Dios no se pierde jamás para el hombre; más bien es estímulo a la acción.

    De verdad es precioso el texto de hoy, como dice Capuchino. QDLB.

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    1. Gracias, aprendiz2. Me gusta: lo que se da a Dios no se pierde jamás para el hombre. Deberíamos hacer nuestra esa idea, ese pensamiento.

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  4. María Estella21 junio, 2012 00:25

    Oh sacerdote de Cristo, Aungue hubiera tenido la pureza como de los ángeles , no hubiera sido digno de recibir este don de consacrar el sacramento de cristo en tus manos. recuerda siempre el día que el obispo te puso las manos y ofrécerte al Señor cuerpo y alma dándole bastante tiempo de cologio intimo con Él,y no te ogobies solamente con mucho apostolado,púe Él es quien valora tu mision. Rezo siempre por vosotros porque vuestra vida en el mundo no todos os recibe con aleqría por decirlo la verdad.
    Os admiro sacerdote de Cristo, cuídad bien este tesoso de vuestro vocación.cuenta con mi oracion D.Javier sacerdote de Cristo Feliz día, y Dios les bendiga.

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    1. Gracias María Estella por rezar por mí.

      Le ruego que siga haciéndolo cada día, por mí, por mis intenciones y por las personas encomendadas a mí.

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