La teología es necesaria a la vida de la Iglesia, porque es el ejercicio de la razón, iluminada por la fe, para comprender los Misterios y traducirlos al hombre de hoy.
El papa Benedicto XVI es un defensor de la vinculación razón-fe y, como buen teólogo, de la función de la teología y sus caminos hoy.
Señalaba como líneas para hacer una sana teología:
1) Las Escrituras como alma de la teología:
"Es importante hacer cada vez más sólido el vínculo entre la teología y el estudio de la Sagrada Escritura, de forma que esta sea realmente su alma y su corazón (cfr Verbum Domini, 31)" (Benedicto XVI, Discurso a la Cong. para la Educación católica, 7-febrero-2011).
2) El teólogo verdadero será un orante, viviendo la oración personal y la oración litúrgica:
"Pero el teólogo no debe olvidar que es también él quien habla a Dios. Es indispensable, por tanto, tener estrechamente unidad la teología con la oración personal y comunitaria, especialmente litúrgica. La teología es scientia fidei y la oración nutre la fe. En la unión con Dios, el misterio es, de alguna forma, saboreado, se hace cercano, y esta proximidad es luz para la inteligencia" (ibíd.).
3) La teología debe cultivar su relación con otras ciencias para entablar diálogos fecundos, y, por extensión, cabría decir que el propio teólogo debe tener amplitud de miras y una cultura lo más vasta posible para su ejercicio teológico:
"Quisiera subrayar también la conexión de la teología con las demás disciplinas, considerando que ésta se enseña en las Universidades católicas y, en muchos casos, en las civiles. El beato John Henry Newman hablaba de "círculo del saber", circle of knowledge, para indicar que existe una interdependencia entre las diversas ramas del saber; pero Dios y sólo Él tiene relación con la totalidad de lo real; en consecuencia, eliminar a Dios significa romper el círculo del saber. En esta perspectiva las Universidades católicas, con su identidad bien precisa y su apertura a la “totalidad” del ser humano, pueden llevar a cabo una obra preciosa para promover la unidad del saber, orientando a estudiantes y profesores a la Luz del mundo, la “luz verdadera que ilumina a todo hombre" (Jn 1,9)" (ibíd.).
Tres líneas para hacer teología que constituyen no sólo el pensamiento del teólogo, sino que cualifica al mismo teólogo.
Me atrevo a hacer extensiva a todos los católicos las tres líneas señaladas por el Papa, no para multiplicar las "opiniones interpretativas" sino para "no comprar" interpretaciones pseudoteológicas que nos quieran vender: un solo Cuerpo y un solo Espíritu, así como una misma esperanza, un solo Señor, una sola fe.
ResponderEliminarConvierto en oración la exhortación del Papa a las universidades católicas.
¡Qué el Niño Jesús les bendiga!
Julia María:
EliminarSi faltan algunos de los presupuestos anteriores, es muy fácil que en lugar de teología se ofrezca "ideología". Eso supone un peligro para la fe del pueblo cristiano.
Un gran abrazo!
Sin duda es necesaria la teología a la iglesia docente, y a los sacerdotes en general. A los laicos, puede ser conveniente, para algunos, para el pueblo llano, pienso que no. para la iglesia jerárquica, y para los religiosos, sin duda, y sobre todo la teología clásica, tomista/agustiniana, como siempre ha sido.
ResponderEliminarÝo diría, con su permiso, que la Teología, que es ciencia una y no múltiple, especulativa más que práctica, y verdadera ciencia, como demuestra con lógica implacable el Aquinate en la 1q 1 de la Suma, la Teología es necesaria a la sociedad, a la cultura, y a las demás ciencias, para que no desbarren por la pendiente del mal, arrastradas por el espíritu de vértigo de la razón ofuscada por el pecado
Alonso:
EliminarIntroduce varios puntos.
Uno de ellos requeriría matización: la teología es conveniente para todos si son capaces de leer y reflexionar. Al menos, para el "pueblo llano" habrá que facilitar la misma teología pero con carácter más divulgativo, más catequético. Pero piense que las grandísimas homilías de los Padres eran predicadas, con su inmenso caudal teológico, al pueblo fiel en las larguísimas liturgias.
Luego estaría potenciar el acceso de los laicos al estudio de la teología, con los Institutos de Ciencias Religiosas u otros cauces. Pero creo que es muy importante hacerlo.
Tal vez podríamos diferenciar entre dar doctrina, y dar teología.
EliminarCuando se da doctrina a los laicos, se les da teológicamente, es decir, comprensivamente, pedagógicamente.
Eliminar¿Cree vd. posible tal diferencia?
EliminarPor ejemplo, hay sermones de san Agustín que cuesta mucho creer que es mera doctrina, cuando, sobre la Gracia o sobre la misma Trinidad, ofrece auténtica teología a los fieles. Imagino que éstos escucharían encadilados a tan gran orador, aunque sin retener tanto contenido ni concepto. Pero más que dar doctrina, me parece que el Magister ofrecía teología.
Amigo, se han cruzado los comentarios.
EliminarPero creo que es posible mantener mi comentario anterior como respuesta a los dos suyos.
Pax!
Reitero insidiosamente que dar doctrina con gran profundidad teológica no es lo mismo que dar teología. jeje
EliminarMe da por pensar que la Teología es conveniente para todos. Hay mucha sabiduría que es dada a los sencillos y no a los sabios de este mundo.
ResponderEliminarSi, creo que la Teología es también para el pueblo llano como yo, sin ninguna formación en la cosa. De eso se encarga mucho y bien el Padre Javier aquí. Es más tiendo a pensar que es ese uno de los objetivos de este blog. Muchas gracias, Padre. Sigo rezando.
Totalmente de acuerdo, amigo.
EliminarAdemás, el blog, este blog, pretende desde su origen ser un cauce de formación teológica, litúrgica y espiritual, lo más accesible posible. Espero que entre todos lo consigamos día a día.
Creo que la teología puede ser para todos, si es dada de forma sencilla con un vocabulario que pueda ser entendido por el común de los fieles. En alguna ocasión he utilizado la razón para dar a conocer una verdad de Fe a mis alumnos niños. Recordé una oportunidad en la que un representante se quejó en el colegio por el hecho de que los niños a nivel de Primaria, no recibían Educación religiosa escolar de un teólogo graduado.
ResponderEliminarMaría Auxiliadora:
EliminarTiene toda la razón del mundo.
¿Cómo estáis por Venezuela? ¿Está todo más apaciaguado?
La Iglesia Católica no es una sociedad que reserva secretos a determinados iniciados, pues esto sería condenar a los que no se considere como tales (¿quién lo determinará?) al albur del error de las “opiniones” de cualquiera, de algún pastor que “se despiste” o de las “interpretaciones” de lo que se ha dado en denominar “laico comprometido”, como si fuera posible ser un fiel católico no comprometido con la totalidad de la persona, inteligencia incluida.
ResponderEliminarEn la historia de la Iglesia se explica la falta de formación de los católicos por la escasa alfabetización en una gran mayoría (bien caro lo estamos pagando), pero hoy ya no existe excusa, cualquier católico debe tomar conciencia de la necesidad de su formación, cueste lo que cueste, conlleve el tiempo, sacrificio y esfuerzo que conlleve, porque la formación de cada católico tiene gran repercusión no sólo en el individuo sino también en la Iglesia como comunidad universal y en la evangelización de la sociedad, del mundo.
En la correcta y amplia formación (mejor cuanto más elevada y amplia se pueda) de todos los católicos nos estamos jugando, en buena parte, la vida de la Iglesia, la vida de los que vendrán detrás de nosotros.
Una cancioncita no litúrgica en su expresión masculina y femenina puede resultar aplicable:
Jesucristo me dejo inquieto, su palabra me lleno de luz,
nunca mas yo pude ver el mundo sin sentir aquello que sintió Jesús.
Yo vivía muy tranquilo y descuidado y pensaba haber cumplido mi deber,
muchas veces yo pensaba equivocado contentarme con la letra de la ley,
mas después que mi Señor pasó, nunca mas mi pensamiento descansó.
Yo creía estar segura y realizada y dejaba descansar mi corazón,
y siguiendo por la vida equivocada cosechaba en mi vida una ilusión,
mas después que mi Señor paso, mi ilusión y mi engaño se acabó.
Sigo a veces intranquilo por la vida, Sin Respuestas al que VIENE A PREGUNTAR,
mucha gente aún se encuentra adormecida y sin ganas de saber ni de llegar,
mas yo se que Él volverá a pasar y el descanso en inquietud Él va a cambiar.
Buenas noches.
Julia María:
EliminarA esta segunda intervención respondo con una sonora carcajada y una sonrisita... ¿Cómo os atrevéis, oh osada, a traer cancioncitas no litúrgicas??????????? ¡Oiga, señora mía, que este blog es muy muy muy muy serio!!!! (jejeje)
Vamos a lo serio:
La Iglesia sólo empleó la disciplina del arcano referida a los catecúmenos y a los paganos, jamás, nunca jamás, para los fieles (a pesar de que los tradicionalistas defienden que el Canon es en silencio por el arcano: ¿arcano para los ya miembros de Cristo???).
Hay que pensar, por ejemplo, en la gran Escuela catequética de Alejandría con Panteno y luego con Orígenes; hay que pensar en los Tratados y Comentarios exegéticos escritos por los Padres para ser leídos por todos; hay que pensar -repito- en los grandes sermones, de alto nivel, predicados al pueblo fiel...
No podemos rebajar el nivel, ni en las Escuelas catequéticas, ni en los Centros de formación, ni en las publicaciones, ni en las homilías... El lenguaje habrá de adaptarse a cada ámbito y cada oyente, pero el nivel tiene que ser alto, no vulgarizado.
Nuestra fe es una fe de comunión y obediencia no de desconocimiento. La fe del carbonero estaba muy bien para el carbonero pero la actual ciudad terrena ya no se calienta ni alumbra con carbón. Dicen en algunos países de mi querida Hispanoamérica tan azotados por las sectas y por las confesiones protestantes: Católico ignorante, seguro protestante ¡Qué decir del secularismo de nuestra triste Europa!
ResponderEliminar¡Uy! Tercera intervención de mi querida Julia María.
EliminarSubrayo: católico ignorante, seguro protestante.
Hay que invertir mucho en la formación del laicado. En eso nadie podrá achacarme a mí, personalmente, dejadez alguna.
Pero también hay que pensar que muchos prefieren ser hoy carboneros y tener una fe así, ruda, mínima... Hemos de empezar por suscitar interés en todo el laicado por su propia formación teológica.
Me permito escribir estas lineas siguiendo con su comentario, creo que el Año de la Fe puede ser una oportunidad para llegar a ese laicado con escasa formación. Valdría preguntarnos en este momento : ¿qué he hecho para responder a ese llamado de renovación, luego de dos meses de haber iniciado el Año de la Fe?
EliminarRespondiendo a su pregunta sobre mi país, continuamos aletargados, sin gobierno, con gran escasez de productos alimenticios y muy tristes, así es como nos sentimos. El gobierno estatal ha tenido un cambio en las últimas elecciones y de ser uno de los estados con gobierno de oposición hemos pasado a ser "rojos-rojitos"como decimos aquí. La educación ha sufrido un duro golpe, pues desapareció la Secretaría de Educación del Estado y todas las escuelas y docentes pasaron a ser parte del sistema nacional Público, obligados a implementar el curriculum bolivariano. Las escuelas privadas estamos mas o menos, solo que ahora un Consejo Educativo sustituye a la Sociedad de Padres y Representantes y la conformación del Consejo Educativo es lo que traería problemas a los dueños y directores de los colegios. Algo así muy resumido es lo que le puedo contar.
Le pido oración, pues mis hijos están en su último año universitario, aunque se encuentran realizando pasantías, lo que afecte a la universidad los afecta a ellos. mantengamos en sus intenciones.