jueves, 17 de noviembre de 2011

Humildad para la verdad

Una dirección clara de la humildad está encaminada a la verdad.


La mentira brota del Maligno y nos lleva a la autosuficiencia, a henchir nuestro espíritu creyéndonos perfectos o los mejores, o viviendo de la mentira de cara a los demás (¡guardar las apariencias! ¡la imagen que tienen de mí!). 

Existe una mentira personal, una máscara que nos cubre el rostro para que los demás vean la hermosura de la máscara y aprecien así a la persona que la lleva, pero si se quitase toda máscara, todo afán de caer bien, todo intento de congraciarse con todos para buscar sus aplausos o estima o afecto o dinero o... entonces, ¿en qué quedaríamos? En la verdad desnuda, en la conciencia limpia y transparente, que no acusa.
No sólo una verdad social, en nuestras relaciones personales, sino una verdad hacia Dios y hacia nosotros mismos, sin pretender engañar a Dios ni engañarnos a nosotros mismos haciéndonos falsas imágenes de lo que somos. Está el pecado de idolatría del propio espíritu que recreándose en sí mismo de forma falsa, lo convierte en Dios.

La verdad de uno mismo frente a sí, frente a los demás, frente a Dios. "La verdad os hará libres" (Jn 8,32), "la humildad es andar en la verdad".




La soberbia siempre es la gran mentira, la tiniebla que impide ver. La soberbia es cerrazón y por tanto impide el acceso sencillo a la Verdad.

Sólo la humildad es receptiva, simple, y entonces puede reconocer la Verdad y ajustar su vida a la Verdad. Los más grandes siempre han sido los más humildes: han sido poseídos por la Verdad. Sin embargo, los espíritus más raquíticos, más cicateros, lejos de la Verdad, se alzan sobre su presunción creyendo que hacen sombra a todos. El soberbio es incapaz de alcanzar la Verdad y ser iluminado por ella, no quiere, no puede; está afincado en la mentira de sí mismo y en la tiniebla; pero el humilde se deja iluminar y busca sencillamente lo bueno y bello y verdadero.

9 comentarios:

  1. Pienso que para ser humilde hay que admitir la verdad, aceptarla desde el convencimiento y reconocimiento; tener ésta como una segunda piel que nos proteje contra el enemigo para no caer en otros muchos pecados.
    La soberbia y la envidia son los peores pecados que puede tener el hombre. Todos los demás están relacionados con esos dos pecados tan tremendos.
    ¡Dios nos libre de caer en ellos!

    Feliz día a todos.

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  2. Buen día,Padre Javier!..Hermosa entrada la de hoy...cortita,clarita y sencillita =) .Un abrazo desde Paraguay.

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  3. Que entrada mas alentadora y estupenda...Gracias.....la virtud mas humillada es la humildad que no es otra cosa que la simple Verdad vivida con naturalidad.....una Gracia más....

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  4. Me encanta este post de hoy. Es sencillamente estupendo.
    Un saludo a todos.

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  5. Buenas tardes don Javier. Es una lucha constante por saber lo que soy y admirarme de que Él quiera venir a mí en cada comunión, el trato eucarístico junto al sagrario permite que Jesús nos limpie a fondo de todos esos moluscos que se pegan al casco.Un abrazo.


    NOTA PARA TODOS LOS QUE ENTRAMOS AQUÍ, POR FAVOR SI OS GUSTA LO LEÍDO PINCHAR EL +1 AZUL EN FONDO BLANCO QUE ESTÁ AL PIE DE LA ENTRADA RECOMENDÁNDOLO. GRACIAS.

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  6. Pobres de nosotros, los hombres, virtud difícil porque tenemos mucho miedo a ser rechazados, a fracasar...y nos refugiamos bajo caretas. A medida que te vas haciendo mayor, vuelves la vista atrás y compruebas el desgaste inútil que ha supuesto mantener cualquier tipo de máscara. Me decía un sacerdote amigo hace años: es necesario pedirle a Dios continuamente que nos conceda la virtud de la humildad pero ojo con lo que pides porque Dios siempre responde a la oración, y la humildad no es ñoñería ni complejo de inferioridad sino claridad de visión, y "ver" es duro aunque da una gran libertad. Dios es el Dios de la Libertad.

    Buenas noches ¡Qué Dios les bendiga!

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  7. Yo pincho en el 1+ y no sale mi voto ¿cómo lo hago para salir?

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  8. Es un trabajo de día a día pues el mundo muchas veces te hace difícil ser humilde, pues muchos adulamos y a veces se nos pasa la mano. Muchas veces me consigo, a veces pensando, recibe lo con humildad, refiriéndome a algún halago por un servicio.Muchos sin quererlo nos idealizan, pues ven en nosotros lo que no somos, aun sin ponernos máscara. Espero haberme explicado ?¿

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