lunes, 7 de noviembre de 2011

El beso de la paz


Una vez más, volvamos al rito de la paz en la Misa.

Rito que la tradición litúrgica de la Iglesia tenía en altísima estima, reservándolo en exclusividad a los fieles cristianos, y quedando excluidos los catecúmenos y los penitentes por estar aún fuera de la Comunión eclesial. 

Ese beso es tan santo que sólo quienes están en Gracia, unidos a la Iglesia, pueden intercambiárselo. Este valor espiritual es el que hoy hemos de tener presente al realizar el rito de la paz en la celebración eucarística: es la paz de la Comunión con el Cristo total, Cabeza y Cuerpo.

Vayamos a la catequesis de los Padres de la Iglesia para vivir bien, entender y realizar con sentido el beso de la paz.

"Mas ya que hemos mencionado el beso, quiero también hablaros ahora sobre él. Siempre que estamos a punto de acercarnos a la sagrada mesa, se nos manda besarnos mutuamente y acogernos con el santo saludo.

¿Por qué razón? Puesto que estamos separados por los cuerpos, en aquella ocasión entrelazamos nuestras almas unas con otras mediante el beso, de modo que nuestra reunión sea tal cual lo era aquella de los apóstoles, cuando el corazón y el alma de los fieles eran uno solo. Así, efectivamente, es preciso que nos lleguemos a los sagrados misterios estrechamente unidos los unos con los otros.

Escucha lo que dice Cristo: Si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, marcha, reconcíliate primero con tu hermano y entonces ven y ofrece tu presente.

No dijo: "Primero ofrece", sino: "Reconcíliate primero, y entonces ofrece".
Por esto mismo nosotros también, con el don delante, primero nos reconciliamos mutuamente, y entonces nos acercamos al sacrificio [recordemos que en todas las liturgias orientales y occidentales el rito de la paz está unido a las ofrendas, excepto en el rito romano ya que san Gregorio Magno lo trasladó a su lugar actual].

Pero hay además otra razón misteriosa de este beso.

El Espíritu Santo nos hizo templos de Cristo, y así, al besarnos mutuamente en la boca, besamos con ternura los umbrales del templo. Que nadie, pues, haga esto con perversa conciencia, con mente engañosa, porque el beso es santo, pues dice: Saludaos mutuamente con el santo beso (1Co 16,20)" (S. Juan Crisóstomo, Cat. Baut. IV, 10).

Si esto es el beso de la paz, habremos de darle hondura espiritual, serenidad y moderación, y no convertirlo en una efusividad de afectos y momento de saludar y charlar un poco. ¡¡Es un beso santo!!

11 comentarios:

  1. Buenos días don Javier.Procuraré tenerlo presente en las Misas durante el rito de la paz.Un abrazo.

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  2. Don Javier, precioso post, refleja verdaderamente al más hermoso de los hijos de Adán: Jesucristo que se humilló a sí mismo, tomando condición de esclavo, por Amor a nosotros.
    Y nos queda sólo acoger este Amor del Esposo, que nos transforme, que nos haga templos vivos de su Espíritu, el único capaz de destruir las barreras que nos separan y darnos la comunión, la koinonía. Entonces es cuando el rito de la paz, el beso santo, tiene sentido: es el signo visible de la actuación de Dios. Explicarlo es difícil, vivirlo es un anticipo del cielo.

    Gracias. Feliz día a todos.

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  3. Yo repartiría esta catequesis por todas las parroquias españolas.

    ¡Qué Dios les bendiga!

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  4. Hago una pausa en el artículo que llevo casi diez días escribiendo, me despejo un poco, y contesto brevemente.

    NIP:

    me alegro de que lo tenga en cuenta. Está cargado de sentido espiritual e interior. Si no hay comunión con los hermanos (la paz de Cristo, beso santo), no puede haber comunión sacramental.

    Desde Sevilla:

    Se explica, se atisba algo del misterio que nos quiere expresar. (Seré bueno hoy: estoy tentado de escribirle con una ironía-broma, pero lo voy a dejar).

    Julia María:

    En cuanto a repartir esta catequesis por todas las parroquias españolas: este blog llega a muchos sitios. Lo leen sacerdotes, religiosos/as y fieles laicos. De por sí debe alcanzar a muchas parroquias y comunidades cristianas.

    Pensemos que este blog pretende ser una inmensa catequesis en una parroquia virtual; también está el imprimir la catequesis y repartirla (entre grupos de formación y de adultos, Catequistas, Cáritas, Cofradías). Sería un apostolado de la prensa, en cierto modo, cada cual en su ámbito.

    Esta catequesis mira sólo un aspecto del rito de la paz. Se complementa con otras que hemos dedicado a la paz y con las que vendrán, seguro, más adelante.

    Por mi parte, esta mañana al leer esta catequesis (programada desde hace muchos meses) he pensado en enviarla a la página mensual que escribo en el boletín de la Adoración Nocturna de mi diócesis. La sección "Formación litúrgica" corre a mi cargo y suelo enviar artículos del tono de esta catequesis: así llegan a más personas.

    Entre todo, pongamos nuestro granito de arena en la difusión.

    Saludos. pax. Feliz día.

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  5. Ni se diga de la paz en una Eucaristía con alumnos de un colegio. Muchos sacerdotes dejan este momento de la paz para el final. Entonces Padre Javier no tendría sentido, según nos comenta pues ¿estaríamos ofreciendo primero y luego reconciliándonos?

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  6. Gracias D. Javier. Nos ha recordado el sentido de darnos la paz y de hacerlo desde la cercanía y le afecto. Se trata de reunirnos más allá de la simple presencia estática en un lugar. Dándonos la paz nos perdonamos y nos hacemos conscientes de que somos comunidad cercana. Es un momento muy bonito.

    He oído en varias ocasiones que se puede considerar que el rito de la paz pueda desplazarse hacia el inicio de la misa. Desde mi punto de vista este desplazamiento puede tener beneficios, como, alejar el "jolgorio" del momento más intimo de la recepción de la Eucaristía. ¿Que piensa de esta posibilidad D. Javier?

    Un abrazo en el Señor a todos :)

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  7. Gracias por darnos a conocer el sentido espiritual del rito de la paz.Para mi - en mi ignorancia - era una cosa que me encantaría que fuera suprimida de la Eucaristía . Necesaria catequesis esta , no estaría de más que nuestros párrocos explicaran esto para que dejara de ser el jolgorio que en tantos sitios y tan amenudo se produce rompiendo la concentración en ese momento tan importante de la Misa

    Un abrazo a todos

    María M.

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  8. Creo que hay que insistir y recordar algo que, aun siendo evidente, se nos va.

    Para prepararnos a la Comunión hay una serie de ritos y son eso precisamente, preparación para la Comunión:
    A)Padrenuestro
    B)Paz
    C)Fracción del Pan
    D) Oración en silencio del sacerdote (y de los fieles)

    La paz no rompe el 'recogimiento' sino que es una PREPARACIÓN para la Comunión. Se trata de cambiar el punto de vista de mirar al rito de la paz. No estorba la preparación para comulgar, sino que es PREPARACIÓN para comulgar.

    La condición, como tantas veces hemos dicho en este blog, es seguir las rúbricas: sobriamente, a los que se tiene a cada lado, y el sacerdote a los ministros sin abandonar el presbiterio.

    Pero reitero: no es un estorbo para prepararse, sino un elemento más para prepararse a comulgar.

    Luego viene un tiempo suficiente, el canto del Agnus Dei y la fracción del Pan consagrado, así como la oración en silencio del sacerdote, para que todos interioricemos, hagamos silencio interior, formulemos nuestra súplica y nos dispongamos al encuentro sacramental con el Señor.

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  9. María Auxiliadora:

    Efectivamente, no tiene sentido. Lo más que sí permiten las rúbricas actuales es que, hecho el saludo del sacerdote, "La paz esté con vosotros", se omite el beso de paz y se pasa a la Fracción con el Agnus Dei.

    Miserere:

    Valga la misma respuesta que a María Auxiliadora.

    Todas las liturgias sitúan el beso de paz vinculado a los dones que se presentan (antes del ofertorio o presentación de dones), menos la Misa romana de san Gregorio Magno que lo desplazó al momento actual, antes del Agnus Dei.

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  10. María M.:


    amiga mía, no quiera suprimir las cosas así, sin más.

    El recogimiento es necesario siempre al celebrar la liturgia, pero no lo confundamos con un intimismo que busca sólo su propia devoción personal y al final le estorba todo (el canto, la homilía, la paz, etc.).

    Saludos cordialísimos

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  11. porque se omite este acto del "rito de la paz" en el cuarto domingo de cuaresma??

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